Justo antes de semana santa me hicieron un encargo especial, las únicas indicaciones fueron que debía ser delicado y en color rosa. Debo decir que el color rosa me encanta, más en su versión fucsia y potente que en la versión pastel, pero esta primavera dominan los pasteles así que finalmente me decidí por una combinación de las 2 variantes.
Hacía unos días navegando por la web buscando imágenes para inspirarme, encontré unas galletas primaverales con la masa de 3 colores, me encantó la idea y decidí probarla para este encargo.
Muchas veces cuando se colorea la masa y se hornea, al dorarse la galleta cambia el color de la masa teñida también, así que cuando horneamos masa coloreada debemos poner más atención que nunca a que la galleta no se dore, debe quedar bien blanca para que no se nos estropee el color.
Las galletas quedaron buenísimas y me parece que el colorido también, aunque para la próxima creo que diferenciaré un poco más los colores.
Aquí las dejo para que las veáis (lástima que no las podáis probar porqué creo que a pesar de ser bonitas el sabor fue lo mejor).
¿Que os parecen?
Unas galletas preciosas, seguro que lo mejor es su sabor como dices, ¡Qué pena no haber estado allí para probarlas, pero las haré seguro.
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